2009-08-27
Dalia Patiño
El dirigente estatal del Partido Revolucionario Institucional, Alejandro Armenta Mier, dejó claro que habrá advertencias serias, así como una serie de mecanismos que implementará el partido para evitar que casos como el de Rubén Gil se repitan.
Aseguró que el PRI es un partido que aprende de su pasado y sus experiencias, así que sin ser ministerio público, pero sí en el terreno de la confianza moral, advertirán a sus expresiones en todos los municipios para que se realicen un análisis interno de sus posibilidades, ya que dijo, de tener alguna circunstancia inconveniente en materia de salud, legal o psicológica, el partido optará por sugerir que se abstengan de participar en el siguiente proceso electoral de 2010.
El dirigente indicó que en el marco de la tarea del Instituto de Capacitación y Desarrollo Político, que ofrece cursos para los aspirantes, también habrá un examen psicométrico básico, psicológico y sociológico de popularidad, asegurando que el partido preservará los requisitos de legibilidad que establece la Constitución Mexicana, la ley orgánica municipal y el artículo 166 de los estatutos del PRI, a fin de no violentar ningún derecho.
Alejandro Armenta advirtió también que habrá capital variable y que los aspirantes son seres humanos con intereses y deseos, pero que el papel de la dirigencia que encabeza antes estas inquietudes, tendrá que ser de sobriedad y unidad.
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